Se dice que una mujer que vivía en una comunidad con sus tres hijos ya no podía trabajar en la chacra y sus alimentos que había guardado se estaban escaseando. Un día, durante el período de cosecha, la madre les pidió a sus hijos que prepararan la tierra para sembrar papas. Ellos respondieron afirmativamente y esa misma mañana se fueron a la chacra llevando su comida. Sin embargo, los tres hermanos no habían tomado ninguna medida en ese momento.